19 agosto 2009

Lectura: "Soy Consultor (con perdón)"

Siguiendo con la tradición de comentar los libros que voy leyendo, os voy a hablar sobre el último que he leído sobre la profesión de consultor de Carlos Abadía Jordana.

Lo primero que puedo deciros es que me lo he pasado "bomba" leyéndolo, me ha gustado el sentido del humor, las parodias y, sobre todo, me he visto identificado en múltiples de las situaciones que Carlos plantea a lo largo del libro.

No puedo decir que comparta todas las posiciones de Carlos, pero sí muchas de ellas... Sobre todo el enfoque que adopta sobre el "consultor" como profesión y la valía que tiene contar con uno de verdad, dejando al margen que existen muchos "wannabes" de la profesión que, en la mayor parte de las ocasiones, lo que provocan es mala imagen y mala prensa para el resto de consultores (¿artesanos?) que ejercen (ejercemos) esta profesión. Y, desde luego, comparto que la profesión es muy difícil, que nunca se vende humo y que, esencialmente lo que se vende es, confianza, que nunca se engaña y que el auténtico consultor se compromete, no se limita a aportar (os recomiendo la lista de valores que Carlos propone para el consultor: prudencia, respeto, trabajador...)

Os comento algunos de los pasajes que más me han gustado:

"Este libro está dirigido a todos aquellos que han elegido libremente la profesión de consultor y no han muerto por el camino. Es, pues, un libro para vivos de espíritu, para personas que creen que ayudar a otras personas a hacer mejor las cosas en la empresa es un trabajo que merece mucho la pena."

"El consultor es un ente orientado a la venta [...] El consultor debe tener conocimiento real del producto que vende, bien adquirido sobre el terreno."

"El consultor, además, debe conocer ese campo de juego que es la empresa."

"(El network) Es lo más importante que tienes que hacer como consultor. Es lo que diferencia al consultor de éxito de cualquier otro profesional del sector normal y corriente."

"Desde mi punto de vista, resulta por lo menos igual de complicado seleccionar una buena secretaria que, por ejemplo, un buen director comercial."

"Los grandes vendedores (de lo que sea) lo son porque son grandes transmisores de confianza y entusiasmo [...] Y en los grandes vendedores de consultoría, la confianza y el entusiasmo deben ser superiores porque se ofrece, en un alto porcentaje, un servicio a futuro, intangible, basado en una experiencia determinada y en la creencia racional de que, si eso que estás contando lo has hecho con éxito alguna vez, tal vez merezca la pena comprar lo que dices."

"Y, más importante, es ser consciente de que tú, consultor, lo eres del cliente, no del usuario ni del beneficiario."

Y muchas otras que me dejo pero que me ha encantado verlas por escrito...



4 comentarios:

Saioa dijo...

Soy una seguidora de tu blog, fundamentalmente de este.
Compré y leí este libro (que se sale de mis lecturas veraniegas habituales) y me reí mucho...., y también me dió que pensar.
Muchas gracias por tus aportaciones y refleciones (que sean más a menudo, por favor!!).
Saludos,
Saioa

Antonio Ramos dijo...

Gracias, Saoia.

Lo estoy intentando, pero el día a día se me hace duro... espero mejorar en el futuro ;-)

En cualquier caso recibir comentarios es lo que más anima... así que, gracias.

Unknown dijo...

Olé!

A mi también me ha encantado y defiendo a ultranza el valor del consultor realizando consultoría "artesanal".

Pero... cómo encaja esto en una tendencia empresarial que tiende a buscar siempre el máximo beneficio? Esto es, hacer las cosas de tal forma que se premia al que lo hace rápido, no al que lo hace bien, buscando siempre los mayores márgenes y alejándose paulatinamente de la "excelencia" profesional.

Vivimos en una época en la que se está "industrializando" nuestro mercado en pos del rendimiento, no de la calidad.

Estoy convencido de que muchos, al leer estas líneas, nos tildarán de consultores "románticos-trasnochados". Y orgulloso de serlo!

Salu2,


A.

Antonio Ramos dijo...

Pues seguro que sí... ¿a tu pregunta de cómo encaja? Muy sencillo, no encaja... o, al menos, dentro de los esquemas que manejamos actualmente. En mi opinión creo que el tema va por la UTP (ya sabes, Unión Temporal de Personas) como "empresas" en las que los integrantes deciden en cada momento cual es su proyecto...

Como tú dices, suena muy "romántico", pero es lo que tenemos los Cáncer, que somos soñadores, no lo podemos evitar.

De nuevo, gracias por tu comentario figura...